El sistema del anarquismo. (Luces y sombras)

Persona, nº 29

Carlos Díaz
12,00 €
Descripción

Carlos Díaz

Prólogo de Luis Narvarte

  • Colección Persona, nº 29, 2009
  • ISBN: 978-84-96611-46-7
  • Páginas: 146

“Aunque me libraba de los procesos semanales por delitos de prensa, no me libraba de las visitas forzadas a la Cárcel Modelo cada vez que venia a España una figura política extranjera. Desde los primeros meses de 1934, no recuerdo que haya pasado un mes sin disfrutar del alojamiento gratuito a cargo del Estado en la cárcel, a veces era una semana, otras dos, la última vez, ya inminente el alzamiento nacional de julio de 1936, por un mes y medio.

En esa situación insegura llegaron de la Argentina mi compañera Elisa y mi hijo Diego. Había que buscar una vivienda y la encontramos al final del mismo paseo Nacional de la Barcelonesa. No teníamos muebles ni con qué adquirirlos y dormíamos sobre un colchón que habían traído los viajeros. De sillas nos servían pilas de libros. Lo que más nos preocupaba era la llegada en cualquier hora de la noche de los funcionarios policiales con cualquier pretexto o con la orden de acompañarles. Un matrimonio alemán amigo nos cedió luego una cama. Ya era algo, y con ella la vivienda destartalada fue cobrando un poco de carácter.

Transcurrían las semanas, los meses, y no salíamos a flote a pesar de la difusión de nuestra prensa y de la favorable acogida de nuestras publicaciones. Había agregado al semanario una especie de suplementos para trabajos de mayor jerarquía, la revista Tiempos Nuevos, y simultáneamente inicié la publicación de libros y opúsculos. No me bastaba el semanario, la revista Tiempos Nuevos, y algunos opúsculos; habría que comenzar también la publicación de libros, aunque para ello no nos alcanzasen los recursos. Disponíamos de una red de paqueteros, militantes activos, en todo el país; en cambio, no teníamos el aparato de distribución a través de las librerías para los libros que deseábamos editar. Llegué a un acuerdo con la editorial Maucci, a la que propuse que tomase a su cargo la difusión de los libros a través de las librerías, y nosotros lo haríamos…” (Diego Abad de Santillán: Memorias de una vida militante).