Los tres centros espirituales de la persona. Introduccion a la filosofía de Dietrich von Hildebrand

Persona, nº 19


Rogelio Rovira
12,00 €
Descripción

Rogelio Rovira

  • Colección Persona, nº 19, 2006
  • ISBN: 978-84-96611-02-3
  • Páginas: 109

“Pretendo ofrecer en este breve libro una introducción sencilla y orgánica a la filosofía de Dietrich von Hildebrand. Sencilla, porque al exponer este pensamiento he huido de todo tecnicismo innecesario y he procurado explicar de modo claro y asequible las afirmaciones y distinciones de este filósofo, ilustrándolas casi siempre con los mismos ejemplos que él utiliza. Orgánica, porque he presentado las diversas investigaciones de Hildebrand como desarrollos unitarios de una tesis capital suya, a saber: que la persona humana posee tres centros espirituales: el entendimiento, la voluntad y el corazón.

La filosofía de Hildebrand se halla recorrida, en efecto, por la evidencia primordial de carácter único que posee el ser personal frente a todos los otros seres que se nos presentan en la experiencia. “El ser personal consciente” –escribe el filósofo en un pequeño estudio sobre La inmortalidad del alma- “manifiesta algo completamente nuevo frente a todos los demás seres. Es, en cierto modo, un ser despierto, un ser que se posee a sí mismo, y en comparación con el cual el ser de un ente meramente corpóreo es sólo “soportado”, si cabe hablar así, por su poseedor. Lo que encierra un acto de creer o de alegría ante un acontecimiento o de comprensión de un estado de cosas que se efectúa con pleno sentido, es algo único y descubre a nuestra mirada un ser absolutamente nuevo frente al ser, por ejemplo, de una cosa material, pero también frente al de una planta a al de un animal.

Al llenar en alguna medida con esta introducción general a la filosofía de Hildebrand un vacío en los estudios sobre este autor en español –y me atrevería a decir que también en otras lenguas-, nada me satisfaría más que haber contribuido a la difusión del conocimiento de unos hallazgos filosóficos que pueden proporcionar el sólido alimento espiritual que todos necesitamos.